P.D.

No voy a entrar en detalles pero quien lea habitualmente este "lo que sea" que escribo (escribía) se habrá dado cuenta del parón de los últimos meses. No sé por qué ha sido, no lo he analizado y no soy de los que pierden el tiempo con ese tipo de ralladuras mentales. Se ha ido, ya no tengo ideas, no hay lapos, estoy seco, no me interesa o no lo necesito, no me apetece temporal o definitivamente... ni idea. Simplemente veo que lo que antes era una costumbre, no sé si necesidad, ahora ya no lo es. Quizá me hago viejo, o mi cabeza ya no es lo que era. Quizá la imaginación ha emigrado a tierras más fértiles, la musa me ha sido infiel con otro, o se ha perdido en el camino a comprar tabaco...

La cosa es que ya no hay lapos que escupir. Los acabé todos o ellos acabaron conmigo y ahora están de fiesta celebrándolo. Si vuelven, volveré. Y si no, peor para ellos, que yo sigo con lo mío, que no es nada realmente.

Un saludo (ante todo, educación),
que puede ser un adiós o un hasta pronto o un ya si eso...
y gracias por todo.

Marco.

Laporrevolución

He dejado los lapos reposar. Sólo un tiempo, para que se asienten y ver si se merecen estar, perdurar incluso. Y no. No lo creo. El juego ha terminado. Los lapos son el pasado y allí se quedarán.

Se viene una laporrevolución.