corríamos

corríamos de un lado para otro sin mirar atrás, todo nos daba lo mismo, siempre buscando una esquina para girar y empezar de nuevo. eso fue hace tanto que a veces pienso que me lo inventé, que no fue así como pasó y que soy más triste de lo que creía.

un día dejamos de correr, no sé bien cuándo, y todo se volvió lento, espeso y monótono, más enfocado, quizá, pero insoportablemente lento. el gris ensució al resto de colores, las voces bajaron unos tonos y necesitamos de las palabras para decir lo que antes salía con un simple gesto.

y dejamos de correr para andar y pronto, muy pronto, nos detendremos.

No hay comentarios: