Amor incondicional

Iban cogidos de la mano, entre árboles y zarzas, tras el sol que caía hacia la noche. Ella se volvió hacia él, lo miró durante unos segundos, casi con amor, y con el tentáculo que salió de su frente, le chupó el cerebro a través del ojo izquierdo.

3 comentarios:

Reb dijo...

Se trataba de una masa mucosa de 0'0001 gramos de espesor. Intentó hacer un globo pero resultó imposible. No servía ni siquiera para eso.
-Qué puta mierda -dijo guardando su tentáculo y recolocándose el escote

Anónimo dijo...

¿Él no sospechaba nada? ¿Quién se mete en un zarzal con una cefalópoda sorbesesos?

MSalieri dijo...

El amor es ciego (sordo, cojo, manco, tartamudo, tiene sobrepeso y halitosis).