Mundial de Québec 2130

15 de junio de 2130,
República de Québec
Nuevo Estadio de Montreal.

Después de los fastos inaugurales de esta nueva edición del Mundial de Fútbol, el Árbitro de Honor se dispone a ordenar el comienzo del encuentro en el que se enfrentarán las selecciones de Québec y Liberia. Esta es la máxima responsabilidad del otrora juez de campo. Antaño el árbitro se paseaba por el terreno de juego y vigilaba por el cumplimiento del reglamento, lo que daba lugar a multitud de errores y conflictos, dada la limitada capacidad perceptiva humana de serie. El intento fallido de mejorar la capacidad del árbitro con implantes cibernéticos (sólo hay que recordar el hackeo de la final del mundial de 2098 y la crisis que provocó entre varios países de la extinta Unión Europea) dio paso al uso exclusivo de IA homologada en la toma de decisiones sobre el juego.

Suena el Silbato y el balón rueda por el campo tras ser golpeado por David Villa 254'. Este jugador ha sido el protagonista de las polémicas previas al comienzo del torneo. La decisión del tribunal de permitir la nacionalización express de un jugador clonado ha abierto la discusión a todos los niveles. De hecho, como podemos ver, recibe la pitada de parte del público que lo sigue considerando una violación del reglamento. Normalmente han de pasar seis meses desde que la solicitud de cambio de nacionalidad entra en el sistema hasta que es confirmada. En el caso de este jugador, en una semana ha recibido el permiso y se ha podido presentar como jugador de Liberia. Ha sido, según se rumorea, un favor de la FIFA a este pequeño país que había perdido por un accidente a su jugador Villa 348' y ha tenido que traerlo de un país vecino no clasificado para el mundial. Además, por primera vez desde la apertura del fútbol a la participación de réplicas se ha dado la curiosa circunstancia de ver clones del mítico David Villa en todas los equipos nacionales. No es nada común encontrarnos con algo así en el fútbol. Como es sabido, los genomas de futbolistas son comprados en exclusiva por un equipo. El caso de Villa es especial ya que sus descendientes han cedidos los derechos sobre su clonación a toda la comunidad futbolística mundial, lo que ha permitido que se dé la multiplicidad de este jugador en el mundial. Y no ha habido selección que se haya arriesgado a no convocarlo, claro.

Pero centrémonos en el juego. Maradona' pasa a Pelé', éste centra hábilmente a Hugo Sánchez' que cabecea. Casillas' detiene el balón que había llegado sin fuerza...

1 comentario:

David Yuste dijo...

Me niego a imaginarme un fútbol clónico sin la presencia de Al-Ghandour... fuera la IA, deshumaniza el deporte!!! (los clones si los veo bien, así habría una selección natural para jugadores como Sosa, Abreu, Njegus, Bogarde, Secretario, etc...) xD